Para la fabricación de fluidos para trabajos con metal se pueden usar como base aceites minerales (nafténicos o parafínicos), vegetales y fluidos sintéticos:
- Aceites nafténicos: Las ventajas técnicas de usar estos aceites son la gran estabilidad de sus emulsiones, que es importante en los fluidos en base agua, su elevado poder solvente, que es útil en formulaciones muy aditivadas, su bajo índice de volatilidad, que les confiere mayores propiedades de transferencia de calor (importante en aceites de corte puro), y sus excelentes propiedades a bajas temperaturas.
- Aceites parafínicos: En comparación con los nafténicos, tienen una temperatura de congelación mayor, un índice de viscosidad mayor, y menor volatilidad (mayor temperatura de inflamabilidad). Los aceites parafínicos se prefieren frente a los nafténicos en aquellas aplicaciones donde es importante un elevado índice de viscosidad o una baja volatilidad.
- Aceites vegetales: Sólo una pequeña parte de la producción global de aceites vegetales se usa para formular lubricantes. Los aceites vegetales tienen buenas propiedades lubricantes, no son tóxicos y su degradabilidad es elevada. Además, se obtienen a partir de recursos renovables. Su elevada biodegradabilidad es también su principal desventaja ya que esto afecta a su estabilidad. Los aceites de colza, de ricino y de girasol tienden a envejecer rápidamente. El aceite vegetal más común para obtener lubricantes es el de colza. Presenta una buena lubricidad, elevado índice de viscosidad, volatilidad relativamente baja y buenas propiedades de extrema presión y antidesgaste. Sin embargo, las propiedades a bajas temperaturas no son buenas y a elevadas temperaturas se oxida rápidamente.
- Fluidos sintéticos: Se obtienen a partir de síntesis químicas más que a partir del petróleo refinado o los aceites vegetales. Son superiores en términos de mayor estabilidad a la oxidación, mayor índice de viscosidad y menor coeficiente de fricción. Además, tienen excelentes propiedades a bajas temperaturas. Las ventajas que ofrecen los fluidos sintéticos son más notables a temperaturas muy bajas o muy altas. La buena estabilidad a la oxidación y el menor coeficiente de fricción permiten operar a temperaturas elevadas, y el elevado índice de viscosidad y el bajo punto de congelación permiten operar a bajas temperaturas.